En pleno apogeo del debate sobre la amnistía que ha hecho posible la investidura de Sánchez, parte del secesionismo parece considerarla ya una pantalla pasada». Y es que ayer, el mismo día en que Sanchez fue investido presidente del Gobierno, el presidente de la Generalitat, Pere Aragonès, aseguró en la BBC y en la CNN que ya se está trabajando en un referéndum de autodeterminación. «Estamos trabajando en un acuerdo para un referéndum en Cataluña, un referéndum acordado entre el Gobierno español y el Govern catalán», dijo en la cadena británica, lo que supuestamente resolverá el «conflicto entre Cataluña y España». Según el dirigente, este plebiscito formaría parte de los acuerdos entre el PSOE y el separatismo.
«Los conflictos políticos se han de resolver a través de la democracia, el diálogo y la negociación y al final, si es posible, alcanzando acuerdos», aseguro el líder nacionalista. «La mayoría de los catalanes quiere un referéndum para decidir el futuro de Cataluña. Nosotros somos muy persistentes, los catalanes quieren una solución», añadió. Idénticas respuestas aportó en la CNN. Cabe recordar que, según las encuestas citadas por la Generalitat y medios afines, en torno a un 80% de catalanes no vería con malos ojos la celebración de un referendo de secesión. Sin embargo, según otros sondeos —por ejemplo, el realizado por GESOP y publicado por El Periódico en 2019—, esta cifra se sitúa en el 40%.
