Vox consigue copar titulares el Día Intenacional de la Mujer. El partido de derecha alternativa ha protagonizado una de las campañas más viscerales este 8M, exhibiendo un cartel que muestra a mujeres tapadas con uin velo islámico, bajo el mensaje «Feliz 8M de 2030» y la consigna Podemos pararlo. La campaña, desplegada en vísperas del 8M, es un mensaje contra la «islamización» de España señalada por Vox, lo cuál ha generando una oleada de reacciones encontradas que han avivado el debate en redes sociales y medios digitales.
8-M de 2030.
— VOX 🇪🇸 (@vox_es) March 7, 2025
Podemos pararlo. pic.twitter.com/pLJ05dTPdb
Un debate de absolutos
Simpatizantes de Vox y usuarios no partidistas han defendido el cartel como una «advertencia legítima» sobre la pérdida de derechos de las mujeres ante culturas «que no respetan la igualdad de género». Los ciudadanos que suscriben el mensaje alertan sobre el futuro de hijas y nietas que reflejan esta postura, argumentando que el feminismo hegemónico actual ignora amenazas reales al centrarse en «performances vacías y cuestiones simbólicas estériles» dejando de lado «el peligro» que el avance de cultural contrarias a los valores occidentales supone para los derechos de la mujer y los avances en materoa de igualdad.
… BRUTALLLLLLLLLLLLLLLLLL…
— Javier Ortega (@JavierO66080535) March 7, 2025
… Este es el cartel de Vox para el 8M, no digas nada solo RETUITEA… pic.twitter.com/O4Sh8qdSah
En una nota mucho más crítica, usuarios y sectores progresistas han condenado ampliamente el cartel, calificándolo de «xenófobo» y «discurso de odio». Publicaciones de medios como El Plural aseveram que Vox «traspasa todos los límites» al vincular el Día de la Mujer con una «narrativa antimigratoria», acusando al partido de aprovechar la fecha para atacar a «colectivos vulnerables» en lugar de abogar por la igualdad.
El revuelo ha colocado el 8M 2025 en una encrucijada, con la polémica del cartel de Vox eclipsando parcialmente las manifestaciones previstas en ciudades como Madrid y Barcelona. El suceso ubraya las profundas divisiones ideológicas en España, avivando uun sentido debate en redes.